¿Porqué incrementa la póliza de gastos médicos?

Hoy en día la medicina ha avanzado de forma exorbitante, hay estudios cada vez más precisos y procedimientos cada vez más efectivos.

Por otra parte los médicos son víctimas de demandas más frecuentes cuando su trabajo no es realizado de forma adecuada.

Hay más especialización en cada ramo de la medicina y más doctores intervienen.

Cómo se reflejan estas premisas. Primero, un hospital invierte ahora más fuertes sumas de dinero en un equipo más moderno, que tiene que "desquitar" en periodos más cortos de tiempo, quizá unos 5 años. Porque en 5 años vendrá un equipo superior y con mejores características. Esto sube los costos de estudios y hospital.

Con la medicina de patente ocurre lo mismo. Nuevas tecnologías demandan que los fuertes gastos de investigación tengan que encarecer la medicina actual, pues pronto vendrán nuevas fórmulas. Adicionalmente, luego de un tiempo su patente se abre para que cualquier laboratorio genérico produzca la medicina, con lo que las ganancias del laboratorio se verán mermadas. Así la medicina de patente es cara.

Los médicos antes diagnosticaban con solo ver al paciente. La gran mayoría de las veces de forma muy atinada. Sin embargo ahora prefieren mandar a hacer no uno, sino múltiples estudios, para diagnosticar mejor la enfermedad, descartar otras posibles enfermedades. Los médicos cada vez se cuidan más de no ser demandados por un error u omisión y prefieren pedir más estudios y costosos a correr un riesgo.

Los hospitales sabiendo los altos costos no dejan de ser negocios (unos más que otros) que administran desde una pastilla a 5 o más veces su valor. Y que prefieren realizar más procedimientos a mayor costo.

Al final las compañías aseguradoras pagan los gastos médicos a todos los niveles repartiendo el costo entre las primas. O sea que todos lo pagamos de una u otra forma.

Las compañías aseguradoras también son para ganar, y sueñan con que el ramo sea sano. Sin embargo es un área frágil en que es común ver pérdidas fuertes y fuertes incrementos en tarifas.

¿Se frenará la tendencia? La solución siento que está en la ética, en los convenios con médicos y hospitales, y en la ley de la oferta y la demanda.

Al final reflexiono: y si me enfermo ¿vale la pena contar con un seguro? Y siempre concluyo que sí, pues no podría yo pagar por mí mismo una fuerte enfermedad a los costos de ahora.